la tormenta
Demente
por creer que a la realidad puede
Algo imposible, algo evocado...
algo equivocado
Mi respirar tu aliento lleva
a través de sendas blancas y azabache en piedra
Y sueño...
En tus ojos vuelo y restauro pensamientos
En tu pecho, el calor que llevo dentro
Nada puedo y todo intento
si me alejo el recuerdo es rojo
si me quedo, es fuego
el orbe sigue en su giro y soy un circo de arena.
Ahora, qué, alma mia? ya no mido el tiempo
Vuela y se detiene
Y le pierdo, le pierdo en el rio del presente
Y sueño
Una tormenta en la montaña que me lleve
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